“A partir del Corazón”
“A partir del Corazón”
Jóvenes luteranos se reúnen en CONGRENAJE 2025 en Brasil
Más de 1.300 jóvenes de Brasil y el mundo se encontraron en Igrejinha para vivir una experiencia de fe, cultura y compromiso social, guiados por el corazón.
Entre el 27 de julio y el 1 de agosto de 2025, la ciudad de Igrejinha, en el estado de Rio Grande do Sul, fue el escenario del Congreso Nacional de Juventudes Evangélicas (CONGRENAJE), organizado por el Sínodo Nordeste Gaúcho de la Iglesia Evangélica de Confesión Luterana en Brasil (IECLB). Bajo el lema “A partir del Corazón”, más de 1300 jóvenes provenientes de todos los sínodos de Brasil -junto a representantes internacionales de Mozambique, Sudáfrica, Estados Unidos, El Salvador y Chile- se dieron cita para compartir fe, cultura y compromiso social.
De Chile participaron nueve jóvenes, entre ellos el presidente de la Juventud Luterana en Chile, Francisco Gómez, y el pastor asesor de la Pastoral Juvenil, el Pr. Everton Luiz Knaul, quienes participaron con entusiasmo en las actividades [MB1] del programa.
Cada mañana, el programa del CONGRENAJE abría con un espacio en el que distintos sínodos y delegaciones compartían su identidad y testimonio. En esa instancia, la delegación chilena presentó un video que mostraba la vida de la Juventud Luterana en Chile y, además, interpretó la canción “Déjate” del grupo Misión País, ofreciendo así un momento de música y espiritualidad que fue recibido con entusiasmo por los y las participantes.
La presencia chilena en el CONGRENAJE forma parte de una relación de larga data entre la Iglesia Luterana en Chile (ILCH) y la IECLB[MB2] . Este es el segundo congreso en que una delegación de jóvenes chilenos asiste en el marco de un vínculo que se ha fortalecido especialmente desde las juventudes.
En virtud de esta relación, actualmente cinco jóvenes brasileños son recibidos anualmente en el Campamento Nacional de Juventud en Chile, mientras que cada dos años una decena de jóvenes chilenos viaja a Brasil para sumarse al CONGRENAJE, consolidando así un intercambio fraterno y enriquecedor entre ambas iglesias.
Fe encarnada en diálogo, aprendizaje y acción
“Es una invitación preciosa para que todas las personas del encuentro -chilenos, brasileños y de otros países- puedan identificar cuál es su verdadero don y, al mismo tiempo, cuál es su verdadera motivación y vocación para trabajar en este mundo y para la iglesia”, expresó el presidente de la Juventud Luterana en Chile, Francisco Gómez.
Uno de los momentos centrales fueron los días de tema, en los que se reflexionó sobre los dones, el servicio y el llamado cristiano desde textos bíblicos mediante diálogos guiados y espacios de intercambio profundo entre los y las participantes. También se ofrecieron talleres prácticos, entre ellos uno sobre resolución de conflictos, donde se abordaron herramientas para la convivencia y el liderazgo en contextos comunitarios.
Además, los y las jóvenes realizaron recorridos turísticos por la ciudad de Igrejinha, una localidad acogedora y pintoresca en la que se realizó casi en su totalidad el CONGRENAJE, siendo destacada por su fuerte herencia germánica, su calidez y por albergar una de las Oktoberfest más importantes de Brasil.
Otra instancia emotiva fue la celebración del Culto de Tomás, una liturgia especialmente pensada para quienes cargan preguntas, dudas o heridas. Inspirado en el apóstol Tomás, este culto invita a una vivencia de la fe honesta, desde la vulnerabilidad, el silencio y el cuidado mutuo, sintonizando profundamente con el lema “A partir del Corazón”.
El penúltimo día, las calles de Igrejinha se llenaron de cantos, pancartas y alegría con el tradicional “Grito”, una marcha pública donde las juventudes evangélicas expresaron su compromiso con una fe activa, que se manifiesta en el espacio público con esperanza, empatía y justicia.
[MB6] El encuentro concluyó con un culto de despedida, presidido por la obispa de la IECLB, la pastora Silvia Genz, en el que se reconoció y agradeció el servicio de quienes culminaron su ciclo en la pastoral juvenil, al mismo tiempo que se dio la bienvenida a nuevas personas que asumen el desafío de acompañar el caminar de las juventudes. Fue un momento lleno de emoción, gratitud y promesa, donde el envío final selló una experiencia marcada por la espiritualidad, el encuentro y la esperanza compartida.